Después de un bagaje personal y profesional muy completito y divertido, soy alguien que ha decidido parar en seco. Sí, sí… me he bajado de un cómodo tren que me arrastraba, para darme la oportunidad de construir algo por mí mismo; y que además me apasiona: ¡escribir y emocionar!
No sé qué saldrá de aquí. Si encontraré mi vocación o si sólo me servirá de entretenimiento. Eso me dan igual, la verdad. Si algo he aprendido en los últimos tiempos, es que todo «movimiento» lleva a algún sitio. Y ¿qué mejor opción que tomar un Camino en el que tú mismo has puesto ese cartel en forma de flecha con la palabra «sueño» escrita en él?
Para que me conozcas un poco mejor, te diré que me licencié en Publicidad y RR.PP., y que he trabajado durante un montón de años en marketing de cine. Además, hace no mucho cursé el Máster en Guión de la Carlos III – ALMA, que me ha llevado a ser durante un largo rato redactor/guionista de programas para varias cadenas de TV. Esta fusión me ha llenado la cabeza de fantasías, lugares recónditos, historias con final feliz y luciérnagas; principalmente luciérnagas. Soy idealista hasta rozar la locura, pero me encanta serlo. Creo en los cuentos de hadas, en que la dieta más saludable se compone en su mayoría de perdices y en que los deseos se pueden cumplir si soplas con la suficiente fuerza…
«Los cuentos de hadas son bien ciertos. Pero no porque nos digan que los dragones existen… sino porque nos dicen que podemos vencerlos.”
G. K. Chesterton
Así que, agárrate fuerte a la crin de este caballo alado… que vamos a emprender juntos un vuelo repleto de trepidantes aventuras, amores improbables (que no imposibles), cuentos sin moraleja, mil miedos por superar y cientos de valores que descubrir. De ésos que sólo existen en la mente de un niño: de la tuya y de la mía.
PD: No dudes en contactar conmigo si tienes alguna consulta, sugerencia, contrato millonario, crítica constructiva… o, simplemente, quieres decirme «hola». ;)
Este es mi e-mail: JarabeDeLuciernaga@gmail.com
Genial, con un buen comienzo, la continuación con éxito está asegurada, tu sueño hecho realidad, y sobretodo que tu ilusión y entusiasmo te harán conseguir la Felicidad, lo más importante en ésta vida. Que sigas siendo siempre el niño convertido en adulto, sólo porque el paso del tiempo se haya empeñado. Bsissss
Pero… Mamááááá!!! jaja!!
Gracias por tus ánimos a prueba de locuras y tu perenne apoyo incondicional! Sin ellos, jamás habría encontrado la receta exacta para elaborar este jarabe tan especial!!
Como siempre: Nuestro Fan Número Uno. :)))
Un comienzo de 10, como era de esperar :o) GRACIAS por compartir tu sueño con el mundo porque leerte es un verdadero regalo y un placer para aquellos que aún llevamos dentro el niño que un día fuimos y que se resiste a dejar de soñar, emocionarse e ilusionarse con mil y una fantasías. Por más que el tiempo avance implacable y se empeñe en hacernos enfermar robándonos cada día un poquito de esa ilusión que nos llenaba de niños, ahora tendremos un rinconcito donde acudir a curarnos los sueños cuando estén pachuchos. Un lugar fantástico en el que recibiremos el mejor y más eficaz remedio contra la tristeza… Una gran cucharada de Jarabe de Luciérnaga.
:OOO ¡Contratada! jaja!!!
No, en serio… Muchas gracias por creer en mí!! Pero debes prometerme una cosita: Jamás te pongas a Escribir como lo haces, y encima crees un blog que se llame «Pastillas de Mariposa» o algo así… que me buscas la ruina!! :P
Gracias de verdad!
PD: A la primera dosis invito yo!!
Aquí tu fan número dos (con el permiso de tu señora madre) y mi falsa modestia escritora, que ahora mismo está pegando brincos y haciendo piruetas, te agradecemos mil el halago :o) Cuando quieras te hago el backup o una colaboración estelar ¡jaja! Lo que no te aseguro es que no me lance al mundo bloguero porque, viendo lo guay que te está quedando el tuyo, me ha picado el gusanillo o, mejor dicho, ¡la luciérnaga! y lo mismo hasta me animo y todo. Eso sí, te prometo que al menos en el nombre pondré empeño para no pisarte el sector jarabil ;o)
Hola Jesús,
Enhorabuena por tu magnífico trabajo y sobre todo, enhorabuena por la ilusión. Es un auténtico placer leerte porque sin levantar los pies del suelo (por aquello de que de momento el ser humano no puede volar por sus propios medios), vuelas, viajas, inventas… El niño que llevas dentro, mejor dicho, el niño que eres, hace sus cosas de niño. ¡Qué delicia!
Además como yo también soy niña (debo de andar por los ocho años)…
Sigue: no te queda otra. Sigue, pequeño Jesús.
Un beso enorme desde el patio del colegio ;)
Gracias, Concha! Me alegro de que todavía quede algún niño que otro más por ahí suelto, que se niegue a permanecer parado dentro de este cataclismo de realidad que nos han impuesto… Esto lo vamos a arreglar con esa ilusión de la que hablas y esas ganas de mandar todo lo que ocupa y no aporta nada a freír monas, como tú dirías!! jaja! Ahora te busco por el recreo para que me des ese beso!! :)
Como sabes, soy novato en estas lides y más en este espacio tuyo, pero no quita para corroborar en lo que hablamos ayer: mi más sencilla enhorabuena y mi apoyo incondicional a tu camino.
mil gracias por compartirlo.
Iré actualizándome poco a poco. ;-)
Gracias por tu apoyo y tu ejemplo de entusiasmo, Chema!!
Seguiremos luchando y brillando, seguro!!
Un abrazo!!
https://polldaddy.com/js/rating/rating.jsHola Jesús. Me ha encantado que me hayas encontrado y, de este modo, te haya encontrado yo a ti. Me siento identificado con esto que cuentas. Con tu frenazo en seco y cambio de dirección rumbo a lo que realmente te llena. También con ese jarabe de luciérnaga. En mi caso la metáfora (o no) viene de la terapia a base de la caricia del gato negro.
Para que veas que lo que digo no es gratuito, te voy a dejar dos enlaces (sin que sirva de precedente, porque esta feo compartir lo de uno en el blog del otro sin permiso 😉 ).
Aquí el relato que da sentido (aunque tal vez un poco críptico) al nombre de mi blog:
https://lacariciadelgatonegro.wordpress.com/2015/11/29/origen/
Y en este enlace mi frenazo y cambio de rumbo:
https://lacariciadelgatonegro.wordpress.com/autor/
Lo dicho, un placer juntar jarabe de luciérnaga y caricias de gatos negros.
Un saludo.
¡Encantado, Andoni!
Los gatos negros y las luciérnagas comparten el mismo contexto, quizás el más mágico e inspirador de todos: la noche. Así que sólo era cuestión de tiempo que nos cruzáramos el uno en el camino del otro…
¡Que empiece la aventura!
PD: Siempre me he preguntado si no seremos nosotros realmente los que les daremos mala suerte a los gatos negros al cruzarnos delante de ellos por la calle, y no al revés. Espero que algún día resuelvas mi duda. ;)
Espero resolverla de manera positiva (para los gatos negros).
Por su parte, el jarabe de luciérnaga parece que sienta muy bien.
¡Nos leemos!