Cada vez tengo más claro que no hay relación más tóxica que la que mantenemos con nosotros mismos. No dejamos de querer más de lo que poseemos, y de exigirnos más de lo que somos. En bucle. Pero lo peor de todo es que, para atormentarnos aún más, nos comparamos una y otra vez con esos seres perfectos que creemos que tienen lo que a nosotros nos falta. ¡Seremos estúpidos!
Sophia Loren y Jayne Mansfield (1957)
Si un día te levantas sintiéndote bajito, estiras la espalda inútilmente cada vez que un jugador de baloncesto pasa a tu lado por la calle, ignorando a los minúsculos jockeys al bajarse de sus caballos; si te sientes tonto, no te pierdes “Pasapalabra” esa tarde para intentar aprender algo, pero acabas sintiéndote más idiota aún; si te sientes pobre, solo te fijas en los dueños de los Porsches que ni se paran para dejarte cruzar el paso de cebra, ¡los muy asquerosos!, y no has leído siquiera el cartel pidiendo ayuda del mendigo arrodillado junto a tu portal.
Al compararnos con otros cuando nos sentimos desgraciados, estamos enfrentando nuestras debilidades a sus fortalezas, enzarzándonos en una batalla interna que no solo vamos a perder al estar en desventaja, sino que vamos a salir de ella más pequeños y, además, apaleados. Agarraos a esta reflexión. A mí me construye escaleras para huir del pozo al que me suelo tirar a menudo, cuando se me activa el modo melodramático. Porque como dice el refrán: «La suerte de la fea, la guapa la desea».
Jarabe de Luciérnaga 
Perfecto. Estoicismo puro y actual. La foto muy sugerente… No es necesario decir que, además, no es oro todo lo que reluce. Ma mejor, la mas grande, hace poco me he entereado que además era una gran, gran actriz, la mejor, Marilin Monroe .. se suicidó.
Eso es, Ciudad Grandola. A veces nos cambiaríamos sin pensarlo por otro/a porque supuestamente lo tiene todo, sin saber la procesión que lleva por dentro. Quizá, mucho más larga y oscura que la nuestra. ¡Gracias por estar ahí! PD: Las de la foto son Sophia Loren y Jayne Mansfield. ;)
👍👍